El Nasdaq se desploma ante el nerviosismo del ISM
Los principales índices bursátiles estadounidenses cayeron sustancialmente el martes 3 de septiembre, impulsados por una liquidación general del mercado provocada por los tibios datos manufactureros estadounidenses. El enfriamiento del entusiasmo en torno a los valores de inteligencia artificial (IA) hizo que Nvidia (NVDA), la favorita de la IA, cayera aproximadamente un 10%, ya que el escepticismo sobre la sostenibilidad del crecimiento del sector siguió aumentando a principios de septiembre.
El S&P 500 bajó un 1,4%, el Dow Jones (USA 30) cayó un 1,1%, y el Nasdaq (NDAQ), de gran peso tecnológico, se desplomó un 2,3%, ya que algunos operadores se decantaron por sectores más defensivos. Los débiles datos manufactureros provocaron descensos en los valores energéticos, que se vieron lastrados por la caída de los futuros del petróleo.
A pesar de que los últimos datos apuntan a la fortaleza económica de EE.UU., preocupa la posibilidad de un aterrizaje brusco, que se considera dependiente de los próximos datos del mercado laboral. Esto es especialmente cierto cuando se debate si el recorte de los tipos de interés por parte de la Reserva Federal en septiembre es lo suficientemente oportuno como para evitar una recesión. Veámoslo de cerca:
La debilidad del sector manufacturero presiona a las acciones de AI
A pesar de que el informe del PMI manufacturero ISM de agosto registró una ligera subida de 46,8 a 47,2 en julio, no alcanzó las expectativas de 47,5, lo que llevó a algunos inversores a decantarse por activos defensivos. Además, el índice de nuevos pedidos cayó de 47,4 en julio a 44,6 y el de producción de 45,9 a 44,8 en el mismo periodo, lo que sugiere la persistencia de los problemas de demanda.
Por otra parte, el componente de empleo subió de 43,4 en julio a 46, con una subida de los Pedidos Pendientes de 41,7 a 43,6. Los precios pagados también subieron de 52,5 previstos a 54, lo que sugiere presiones inflacionistas persistentes, que complican el camino de la Fed hacia la normalización. Sin embargo, cuando los participantes en el mercado regresaron del fin de semana del Día del Trabajo, las expectativas de un aumento de la volatilidad provocaron tomas de beneficios y reposicionamientos, y los inversores adoptaron una postura más cauta tras los recientes datos de desempleo.
Los temores de recesión se han acentuado recientemente tras el aumento de la tasa de desempleo hasta el 4,3%, que desencadenó la regla Sahm. El PMI del martes contribuyó a la caída del Nasdaq, mientras los inversores seguían recelosos de los recientes resultados de Nvidia, pese a superar las expectativas de los analistas. Taiwan Semiconductor (TSMC) y Advanced Micro Devices (AMD) también bajaron, y los inversores vigilan los próximos resultados de Broadcom (AVGO).
Además de los datos del ISM en EE.UU., los precios del crudo (CL) registraron importantes pérdidas el martes, tras la información de Bloomberg sobre una posible resolución de la crisis bancaria de Libia. Esta crisis ha provocado una interrupción de la producción de petróleo de aproximadamente 660.000 barriles diarios, lo que ha hecho temer una desaceleración económica.
Aunque la probabilidad de un recorte de los tipos de interés aumentó ligeramente, como reflejo de la incertidumbre sobre los próximos pasos de la Reserva Federal en medio de señales económicas contradictorias, algunos inversores buscaron refugio en los sectores de bienes de consumo básico, inmobiliario y de servicios públicos.
Perspectivas mixtas del mercado
El débil informe del ISM manufacturero puede haber reavivado la preocupación por una ralentización económica en EE.UU., dejando a los inversores centrados en los próximos datos de empleo para calibrar los próximos movimientos de la Fed en materia de tipos de interés. Si los datos económicos siguen decepcionando, podrían aumentar las expectativas del mercado de recortes de tipos.
Además, al otro lado del charco, en China, los continuos problemas del mercado inmobiliario indican una debilidad persistente, que se traduce en inestabilidad económica para los hogares y supone un importante lastre económico. Todo ello mientras China intenta estabilizar su moneda mediante tipos de interés más bajos, lo que crea confusión e incertidumbre en el mercado, ya que Pekín se debate entre la apreciación de la moneda y las prioridades de crecimiento económico.
Por otro lado, sin embargo, el S&P 500 sube alrededor de un 18% en 2024, impulsado por el optimismo en torno a los recortes de tipos de interés de la Fed. Los hogares estadounidenses han aumentado las asignaciones a acciones hasta el 42% de sus activos totales, el nivel más alto desde 1952, mientras que los profesionales se sumaron a las nuevas apuestas alcistas sobre el índice hasta niveles no vistos desde 2020. Pero a pesar del sentimiento alcista, algunos inversores mantienen la cautela debido a la volatilidad histórica de septiembre y a las posibles turbulencias en torno a las elecciones presidenciales.
Septiembre ha sido un mes históricamente volátil, y este año se ve exacerbado por la incertidumbre en torno a las próximas elecciones presidenciales estadounidenses de noviembre, por lo que se espera que los inversores mantengan la cautela. Sin embargo, la historia no puede dictar el futuro ni indicar los resultados futuros. (Fuente: Reuters)
Conclusión
Los inversores podrían estar preparándose para una volatilidad continuada en el Nasdaq antes de las próximas cifras de empleo de esta semana. Con la IA a la cabeza del pacto debido a los débiles datos manufactureros del ISM en EE.UU., algunos inversores se inclinaron desde el Nasdaq hacia apuestas defensivas para sortear la creciente volatilidad de septiembre.
En medio de una caída sustancial liderada por Nvidia, la favorita de la IA, el futuro del índice tecnológico estadounidense puede depender de si la incertidumbre económica persiste y hace temer un aterrizaje brusco o enfría los recientes descensos.