¿Qué son los tipos de interés y cómo afectan a los mercados?

Es seguro que, ya sea en las noticias, en las redes sociales o a través de su amigo entusiasta de las finanzas, de una forma u otra, habrá oído hablar de los tipos de interés.

Son cifras económicas clave que conviene comprender y estudiar para afrontar mejor la economía.

En consecuencia, este artículo explorará los tipos de interés, qué son y cómo pueden afectar a su cartera de negociación.

TL;DR

• Un tipo de interés es el porcentaje que se gana por el dinero ahorrado o que se paga por el dinero prestado: los bancos lo utilizan para incentivar el ahorro o para obtener beneficios de los préstamos.

• Unos tipos más altos implican más ganancias de ahorro y mayores costes de amortización del préstamo. Los tipos más bajos abaratan el préstamo, pero el ahorro es menos gratificante.

• Los tipos de interés incluyen los tipos de interés fijos, los tipos de interés variables y las tasas anuales efectivas (TAE).

• Los tipos de interés influyen en la inflación, la recesión, el gasto de los consumidores, el crecimiento de la industria y la estabilidad económica.

• Unos tipos más altos suelen perjudicar a las cotizaciones bursátiles; unos tipos más bajos favorecen el crecimiento.

• Unos tipos más altos suelen traducirse en una divisa más fuerte y unos precios de las materias primas más bajos.

• Unos tipos más bajos suelen debilitar la moneda y aumentar el atractivo de las materias primas.

¿Qué es un tipo de interés?

Un tipo de interés puede ser el porcentaje que has ganado del dinero que has ahorrado o que debes al prestatario. Por ejemplo, si pides un préstamo al banco, el tipo de interés es el porcentaje del dinero que tienes que pagar al banco a cambio de que te conceda el préstamo. Por otro lado, si ahorras dinero en una cuenta de ahorro, el tipo de interés es el porcentaje que has ganado como respuesta por ahorrar dinero. Quizá por eso muchos bancos utilizan los tipos de interés para incentivar a los clientes a abrir cuentas de ahorro.  

¿Cómo funcionan los tipos de interés?

Dado que un tipo de interés es un porcentaje de la cantidad de dinero ahorrada o prestada, el precio global del préstamo o ahorro se ve afectado por él. En consecuencia, unos tipos de interés más altos significan que usted gana más dinero con sus ahorros. Por otro lado, unos tipos de interés más altos significan que tiene que pagar más dinero a su prestamista. (Fuente: Bank of England)

¿Cuáles son los distintos tipos de interés?

Los tipos de interés son de tres tipos: Fijo, Variable y Tasa Anual Equivalente (TAE).

El interés fijo se considera uno de los tipos de interés más comunes. Este tipo de interés suele referirse al dinero que un prestatario tiene que devolver a su prestamista a cambio del préstamo. Como su nombre indica, este tipo de interés es fijo, es decir, predeterminado y estable, y suele decidirse antes del inicio del acuerdo entre el prestamista y el prestatario.

Al hablar de tipos de interés variables frente a tipos de interés fijos, a diferencia de estos últimos, cuyo valor es estable, los tipos de interés variables fluctúan con el tiempo en función de los cambios periódicos de un índice o tipo de interés de referencia subyacente. Esto significa que si el índice o tipo de interés subyacente se deprecia, entonces la cantidad de dinero que usted debe a su prestamista disminuye. Del mismo modo, si el índice o tipo de interés subyacente sube, la cantidad de dinero que debe a su prestamista aumenta. 

Por último, la Tasa Anual Equivalente (TAE) es la cantidad de interés que se paga anualmente a cambio de pedir dinero prestado. Además del interés, la TAE incluye las comisiones que hay que pagar por pedir dinero prestado. Por tanto, cuanto más alta sea la TAE, más pagarás con el tiempo. Además, este tipo de interés es popular entre las compañías de tarjetas de crédito.

¿Por qué son importantes los tipos de interés y cómo afectan a la inflación?

La principal importancia de los tipos de interés es que influyen directamente en la inflación, la deflación y la recesión. En épocas de inflación elevada, como las observadas recientemente en todo el mundo, los bancos centrales suben los tipos de interés para combatirla. 

Además, los tipos de interés son importantes porque afectan a los costes de los préstamos y a la toma de decisiones financieras, y moldean la economía alterando la formación de mano de obra y recursos. En otras palabras, los tipos de interés afectan al crecimiento, la contracción y el despliegue financiero de las industrias.

El impacto de las variaciones de los tipos de interés en los mercados

Aunque los resultados pasados no reflejan los resultados futuros, históricamente hablando, el impacto de las variaciones de los tipos de interés es el siguiente:

Mercados bursátiles 

Subida de los tipos de interés:

Cuando suben los tipos de interés, los préstamos se encarecen para los consumidores y las empresas. Esto suele reducir el gasto y la inversión, mermando los beneficios empresariales y presionando a la baja las cotizaciones bursátiles. Los valores de crecimiento -especialmente en sectores como el tecnológico, que dependen del endeudamiento- son especialmente vulnerables. Por el contrario, los valores del sector financiero (por ejemplo, bancos y aseguradoras) suelen beneficiarse, ya que unos tipos más altos pueden ampliar sus márgenes de préstamo.

Bajada de los tipos de interés:

Unos tipos de interés más bajos reducen el coste de los préstamos, estimulando el gasto y la inversión. Esto tiende a respaldar los beneficios empresariales y a impulsar al alza las cotizaciones bursátiles. Un claro ejemplo son las bajadas de tipos de emergencia de la Reserva Federal durante la pandemia de 2020, que contribuyeron a un rápido repunte del mercado.

Mercados de renta fija

Subida de los tipos de interés:

Los precios de los bonos se mueven de forma inversa a los tipos de interés. A medida que los tipos suben, los bonos existentes con rendimientos más bajos se vuelven menos atractivos, haciendo que sus precios caigan. Sin embargo, se emiten nuevos bonos con rendimientos más altos, ofreciendo mejores rendimientos a los nuevos inversores.

Bajada de los tipos de interés:

Los bonos existentes con rendimientos más altos ganan valor cuando los tipos bajan, aumentando los precios. Por el contrario, los bonos de nueva emisión ofrecen rendimientos más bajos, lo que puede resultar menos atractivo para los inversores.

Otros mercados

La subida de los tipos de interés suele ejercer una presión a la baja sobre los precios de otros mercados, como el de las materias primas. Esto se debe principalmente al aumento del «coste de transporte» -el gasto de mantener y almacenar inventarios-, que hace menos atractivo para los inversores y comerciantes mantener grandes posiciones. Al encarecerse el almacenamiento, disminuye la demanda de existencias, lo que a menudo se traduce en un descenso de los precios de las materias primas. 

En mercados como el de divisas, cuando un país aumenta sus tipos de interés, su moneda suele fortalecerse, ya que los mayores rendimientos atraen capital extranjero, lo que impulsa la demanda de la divisa. Por otra parte, la bajada de los tipos de interés suele provocar la depreciación de la moneda, ya que la reducción de los rendimientos hace que el país sea menos atractivo para los inversores, lo que disminuye la demanda de su moneda.

Conclusión 

En una economía mundial cada vez más inflacionista e incierta, entender los tipos de interés ya no es solo cosa de economistas o inversores, sino que resulta esencial para cualquier persona que tome decisiones financieras, empresariales o comerciales. Los tipos de interés afectan a todo, desde su cuenta de ahorros hasta la salud económica nacional. Tanto si suben para luchar contra la inflación como si bajan para estimular el crecimiento, los efectos son amplios y afectan a los mercados de acciones y bonos, al valor de las divisas e incluso a los precios de las materias primas. Si aprende cómo funcionan los tipos de interés, los distintos tipos y su impacto económico más amplio, podrá tomar decisiones financieras más inteligentes y responder de forma proactiva a los cambios del mercado.

*El rendimiento pasado no refleja resultados futuros.