Los índices y Tesla se disparan tras la victoria de Trump
El 6 de noviembre, el mercado de índices estadounidense se disparó hasta alcanzar niveles históricos en respuesta a la victoria de Donald Trump sobre Kamala Harris en las elecciones presidenciales de Estados Unidos. La decisiva consecución de los votos electorales en los estados más disputados, que aseguró la posición de Trump como el 47º presidente, marcó un cambio significativo en el mercado, alimentando el optimismo de los inversores en general y hacia el líder del sector de los vehículos eléctricos, Tesla, en particular. Veámoslo más de cerca:
El repunte de Trump en Wall Street
El 6 de noviembre, el Índice Industrial Dow Jones ( EE.UU. 30) subió más de un 3,5%, lo que representó su mejor rendimiento en un solo día desde 2022 y marcó un nuevo récord, mientras que el S&P 500 subió un 2,5%. El Nasdaq 100, en el que cotizan valores clave relacionados con Trump como Trump Media & Technology Group (DJT), avanzó casi un 3%, cerrando también en máximos históricos.
En particular, los bancos regionales experimentaron un impulso significativo, impulsados por la anticipación de las políticas favorables a las empresas de Trump. El Russell 2000 (EE.UU. 2000), que incluye muchos valores de pequeña capitalización como los bancos regionales, también subió más de un 5,8%.
Aunque los participantes en el mercado pueden estar muy centrados en la victoria de Trump y sus implicaciones, el renovado control republicano del Senado, la cámara alta del poder legislativo estadounidense, añade otra capa de posibles cambios políticos. En el momento de escribir estas líneas, sin embargo, sigue sin estar claro qué partido político tendrá la sartén por el mango en la Cámara de Representantes. Ahora que está claro quién será el próximo inquilino de la Casa Blanca, los inversores pueden estar centrando su atención en la Reserva Federal, que se espera que anuncie hoy un nuevo recorte de los tipos de interés del 0,25%. (Fuente: Yahoo Finance)
La apuesta de Musk por Trump resulta rentable
El apoyo vocal de Elon Musk al presidente electo Donald Trump ya está beneficiando a los accionistas de Tesla (TSLA). La subida de las acciones de Tesla tras la victoria electoral de Trump puede ser el producto directo del fortalecimiento de la relación entre el influyente consejero delegado y el presidente electo, lo que suscita preguntas entre operadores e inversores por igual sobre lo que esto significa para el futuro de Tesla.
Musk ha mostrado un importante compromiso político este año, donando más de 130 millones de dólares en total a los esfuerzos electorales y posicionándose como un destacado partidario de Trump. Este respaldo parece haber sido bien recibido, con Trump refiriéndose a Musk en su discurso de victoria como un «súper genio».
Históricamente, la relación entre Trump y Musk ha sido tumultuosa. En 2022, Trump criticó a Musk en Internet, recordando casos en los que Musk buscaba apoyo para proyectos relacionados con vehículos eléctricos y exploración espacial. Sin embargo, el respaldo político de Musk al candidato republicano en julio, tras un intento de asesinato, parece haber propiciado una renovada alianza entre ambos.
La postura algo ambivalente de Trump hacia la industria del vehículo eléctrico añade más complejidad a esta relación. Aunque ya había calificado a los vehículos eléctricos de «engaño» y criticado su impacto económico, sus últimos comentarios reflejan un enfoque más suave, probablemente influido por el apoyo de Musk. Los analistas sugieren que esto podría dar lugar a cambios en las políticas, que podrían hacer retroceder las subvenciones a los VE y las normas de emisiones de la era Biden, lo que a primera vista podría parecer perjudicial para el sector.
Sin embargo, la posición de liderazgo de Tesla en el mercado de los vehículos eléctricos podría convertir estos posibles cambios políticos en ventajas. Algunos analistas afirman incluso que la escala de Tesla podría permitirle prosperar incluso sin subvenciones, ya que los aranceles más elevados a los fabricantes chinos de VE podrían limitar la competencia. Además, la administración de Trump podría acelerar la aprobación regulatoria de los ambiciosos proyectos de vehículos autónomos y robotaxi de Tesla, lo que reforzaría su potencial crecimiento futuro.
Conclusión
En general, parece que la reacción inicial de los operadores al maremoto político en Estados Unidos ha estado marcada por el optimismo. Queda por ver si eso sigue siendo así, tanto para Tesla como en general, a medida que avancemos en los últimos meses de la administración de Joe Biden y el próximo regreso de Trump al Despacho Oval.