Las acciones de Alibaba se recuperan el martes
Las acciones de Alibaba (BABA) se recuperaron el martes tras la fuerte caída del día anterior. Después de que el gigante tecnológico chino solicitara el registro de mil millones de acciones depositarias estadounidenses, las especulaciones sobre las intenciones de la empresa pueden haber asustado a los operadores.
El temor a una caída empuja a Alibaba a la baja
Alibaba ha experimentado bastantes altibajos en el último año. La empresa ha tenido que lidiar con la creciente regulación china de la industria tecnológica del país, los efectos continuos de la pandemia del COVID-19 en el comercio internacional, así como el hecho de que su director ejecutivo, Jack Ma, evitara aparecer en público durante tres meses tras unas polémicas declaraciones sobre el sector bancario de su país. Sin embargo, su última caída se debe a otro motivo. El lunes, el precio de las acciones de la empresa cayó algo menos del 6% en el transcurso de la jornada.
Esta drástica caída podría deberse a la reciente presentación de Alibaba ante la Comisión del Mercado de Valores de Estados Unidos (SEC) para registrar mil millones de acciones depositarias estadounidenses (ADS). Las ADS son acciones de empresas no estadounidenses en manos de bancos estadounidenses que permiten la negociación en Estados Unidos. También permiten a los accionistas cuyo capital en la empresa no se ha registrado en la SEC vender acciones.
Después de que los analistas de Citigroup (C) especularan con que el registro de estas acciones depositarias estadounidenses podría significar una próxima venta por parte de los grandes accionistas, todo empezó a rodar. Los analistas de JPMorgan (JPM) aconsejaron a sus clientes que podría producirse una importante descarga de acciones de SoftBank.
SoftBank posee una participación de casi el 25% en Alibaba, y ha sido uno de sus principales inversores desde antes de que la empresa saliera a bolsa en 2014. Dada su temprana adquisición del potencial de Alibaba, según los analistas, es posible que gran parte de las acciones que SoftBank (9984.TY) posee en el conglomerado chino no estén registradas oficialmente y solo puedan venderse tras el registro de ADS.
Las presiones financieras sobre el conglomerado japonés también han aumentado recientemente debido al declive de la fortuna de muchas empresas tecnológicas en las que SoftBank posee acciones, como Doordash (DASH). Además, la posible cancelación de la adquisición de Arm, filial de SoftBank, por parte de NVIDIA (NVDA) podría llevar a la empresa de Tokio a tener que pagar 1.250 millones de dólares como "comosiones por la cancelación de operaciones".
En consecuencia, los observadores del mercado más avispados establecieron una correlación entre la presentación de Alibaba ante la SEC y los 5.390 millones de acciones que posee SoftBank, planteando que esta última podría deshacerse de una parte de su capital para financiar la recompra de acciones. Los 82.000 millones de dólares de capital de SoftBank en Alibaba valen incluso más que la propia capitalización bursátil de SoftBank, que es de 80.000 millones de dólares. Estas especulaciones podrían haber sido la próxima causa de la caída del lunes en el valor de las acciones de Alibaba.
La negación de SoftBank lleva a su recuperación
Sin embargo, la caída del lunes de Alibaba fue seguida por un impresionante repunte el martes. El fundador de SoftBank, Masayoshi Son, rechazó las imputaciones de los analistas de que la empresa estaba preparando una venta de su participación del 24,8% en Alibaba, y en paralelo, las acciones de esta última subieron un 6,1% en el transcurso de la jornada bursátil. Las acciones de SoftBank también subieron un 5,6% en el transcurso de la jornada bursátil del miércoles en Asia, con los operadores quizás animados por el hecho de que la empresa estaba en una situación financiera menos grave de lo que se especulaba.
A pesar del alentador repunte de ayer, las acciones de Alibaba siguen estando más de un 61% por debajo de su punto máximo de 317 dólares por acción, alcanzado a finales de octubre de 2020. La continua incertidumbre sobre la futura dirección del Partido Comunista Chino con respecto a las regulaciones tecnológicas puede provocar que los operadores sigan desconfiando de las perspectivas de crecimiento continuado de Alibaba, y aún no está claro si el gigante asiático volverá a subir a su antiguo máximo.
Es evidente que los últimos tiempos no han sido nada sencillos para las empresas tecnológicas, especialmente en Asia. Las subidas y bajadas de esta semana en la cotización de Alibaba pueden indicar que la incertidumbre todavía está lejos de terminar.