¿Seguirá subiendo el dólar mientras se acerca a su máximo de 18 meses?
El dólar estadounidense ha estado en alza durante la última semana, acercándose a su valor más alto frente a otras divisas en año y medio. Sin embargo, la continuidad de esta tendencia dependerá en gran medida de factores que escapan al control de las autoridades monetarias estadounidenses.

El billete verde gana terreno
En el transcurso de la última semana de cotización, el índice estadounidense del dólar (DX), que mide la mayor moneda de reserva del mundo frente a un conjunto de seis grandes divisas mundiales, subió casi un 1,7%. Esta importante medida de la fortaleza del dólar estadounidense no alcanzaba tales niveles desde principios de julio de 2020. La libra esterlina y el euro también bajaron en la última semana de cotización frente al dólar, un 1% y un 1,7% respectivamente. Entonces, ¿qué factores han llevado a este aumento de la fuerza del dólar?
Como muchos operadores sabrán, la semana pasada fue bastante tumultuosa para los mercados, desde Nueva York hasta Tokio. La reunión de la Reserva Federal de la semana pasada concluyó sin un aumento inmediato de los tipos de interés, pero el presidente de la Fed, Jerome Powell, indicó que la era de la liquidez promovida por los bancos centrales podría llegar pronto a su fin. El sentimiento del mercado parece ser que la primera de cuatro, o incluso cinco, subidas de los tipos de interés en Estados Unidos podría llegar tan pronto como a mediados de marzo.
Ante la perspectiva de que el Comité Federal de Mercado Abierto dé un giro de timón para frenar la inflación récord, la semana pasada predominó la aversión al riesgo en las plataformas de negociación de todo el mundo. La decisión de los inversores de retirar su dinero de los activos más "arriesgados" puede haber sido uno de los principales factores de la subida del dólar.
¿Perdiendo el impulso?
Sin embargo, una apertura menos volátil de la semana bursátil podría restarle fuerza al dólar. El lunes, los índices de toda Asia parecían estar en vías de recuperación tras la agitación de la semana pasada; el Nikkei-225 (Japón 225) y el Hang Seng (Hong Kong 50) cerraron con una subida del 1%. Aunque en el momento de redactar este informe aún no se había iniciado la negociación en Nueva York, el viernes pasado el S&P 500 (USA 500) rompió su racha de pérdidas con una subida del 2,4%.
Esta apariencia de vuelta a la normalidad de los principales mercados bursátiles puede tener implicaciones para la trayectoria de crecimiento del dólar a corto plazo; si los operadores se recuperan de su reciente temor inducido por el endurecimiento de la política monetaria, la inflación y la aparentemente interminable pandemia del COVID-19, el ánimo de aversión al riesgo que ha impulsado al dólar frente a otras divisas podría disiparse. En consecuencia, el índice del dólar cotizaba a la baja casi un 0,3% en el momento de escribir este artículo, el lunes por la mañana. Sin embargo, muchos pares de divisas importantes podrían verse afectados por las decisiones políticas tomadas más allá de las costas estadounidenses.
Decisiones de los bancos centrales
El banco central de los Estados Unidos ha acaparado los titulares esta semana, pero los observadores del mercado pueden estar esperando con ansia las decisiones que salgan de Londres, Sydney y Fráncfort en los próximos días.
El Banco de la Reserva de Australia (RBA) celebrará una reunión sobre política monetaria el martes 1 de febrero. A esto le seguirá una declaración sobre la misma el próximo viernes. Muchos expertos en política monetaria esperan que el RBA se prepare para un giro similar, consistente en el fin de su programa de compra de bonos por valor de 4.000 millones de dólares australianos a la semana. Sin embargo, a pesar del aumento de la inflación, algunos pronostican que el consejo de administración del banco no avanzará hacia una subida de los tipos de interés hasta finales de año, e incluso hasta 2023. El AUD/USD subía un 0,7% el lunes por la mañana, pero una subida de los tipos de interés en EE.UU. junto con un tipo de interés bajo en Australia podría mantenerlo a la baja.
En el viejo continente, el Banco Central Europeo y el Banco de Inglaterra parecen divergir en sus orientaciones políticas. El Banco de Inglaterra podría estar en camino de instituir la segunda subida de los tipos de interés del país en dos meses, la primera vez que esto ocurre en dieciocho años. Si el Banco de Inglaterra toma este camino tras su reunión del jueves, podría ayudar a combatir la inflación más alta de los últimos treinta años en el Reino Unido. Además, el par GBP/USD, que ha subido un 0,2% hasta superar los 1,34 dólares en el momento de escribir este artículo, podría verse impulsado por un nuevo aumento de los tipos de interés británicos.
Por el contrario, el Banco Central Europeo, con sede en Fráncfort (Alemania), parece más atraído por la vía lenta hacia la normalización monetaria. El BCE, dirigido por Christine Lagarde, también se reunirá el jueves; sin embargo, no se espera que los responsables de la política monetaria de la UE reduzcan las compras de activos a corto plazo. El par EUR/USD subió casi un 0,3% el lunes por la mañana; que esta tendencia se mantenga a lo largo de la semana depende, al menos en parte, de la decisión del BCE del jueves.
Las mareas parecen estar cambiando rápidamente en los mercados de divisas en lo que respecta al dólar. La semana pasada, el billete verde estuvo a punto de alcanzar su mayor subida semanal en siete meses, pero desde esta mañana, otras divisas están recuperando terreno. A pesar de ello, algunos analistas de JPMorgan (JPM) sostienen que el giro agresivo de la Fed llevará al dólar a subir frente al euro y al yen durante otros dos meses.
Lo que sí es probable es que la tendencia de la mayor moneda de reserva del mundo en los próximos días venga determinada en gran medida por las decisiones de los bancos centrales y la volatilidad del mercado, o la falta de ella. Una desestabilización geopolítica importante, como una invasión rusa de Ucrania, también podría hacer que los operadores buscaran un refugio seguro en forma de posiciones en el dólar. Los operadores tendrán que esperar y ver cómo se desarrolla esta semana.