Moderna cae tras las declaraciones de Biden
Tras la subida de las acciones de la semana pasada, la empresa farmacéutica y biotecnológica estadounidense Moderna (MRNA) dio un giro de 180 grados. El lunes, el magnate de la salud cayó un 7,14%. Las últimas declaraciones del presidente de EE.UU., Joe Biden, junto con una economía debilitada e inflacionaria, podrían ser las causas de la mala situación de Moderna.

Moderna: Un rápido resumen
El éxito obtenido por Moderna en 2021 durante el brote de la pandemia de COVID-19 fue irrefutable, ya que el valor de la empresa subió más del 330% desde enero de 2021 hasta agosto de 2021. El increíble ascenso de Moderna puede haberla convertido en una de las empresas de vacunas contra el COVID-19 más destacadas y sustanciales. Sin embargo, con la disminución de los efectos del virus y la presencia de menos casos de infección, la empresa, tal vez lógicamente, perdió parte de su brillo en el último año, ya que cayó un 45% en el momento de escribir este artículo.
Sin embargo, a pesar de la evidente caída general del gigante de la biotecnología en los últimos meses, la semana pasada, Moderna parecía estar subiendo la escalera del éxito una vez más. El 14 de septiembre, el director general de Moderna, Stéphane Bancel, desveló un posible acuerdo con China en el que proporcionaría vacunas COVID a la mayor población del mundo. Mientras que el resto del mundo parece depender en gran medida de las vacunas de Moderna y su rival, Pfizer, China tomó un camino diferente. La nación más poblada del mundo ha recibido sus inyecciones de vacunas fabricadas en China. Por ello, la noticia de esta posible colaboración puede haber provocado el suspenso sobre el éxito de las vacunas existentes en China y también ha disparado la cotización de las acciones de Moderna, que han subido un 6,1%. Después de haber caído significativamente en el último año, un acuerdo como éste podría impulsar el precio de las acciones de la empresa según algunos analistas del mercado y podría proporcionar la comodidad que buscan los operadores e inversores de Moderna. (Source:Brannon’s)
Biden, Moderna y Pfizer
A pesar de la tendencia optimista observada la semana pasada, ayer los inversores parecen haber desviado la atención de Moderna. En una controvertida entrevista, el Presidente de EE.UU., Joe Biden, declaró que, por un lado, cree que EE.UU. sigue teniendo un problema con la pandemia, y por otro que "la pandemia ha terminado". Esta afirmación, tal vez oximorónica, causó un gran revuelo en el ámbito comercial. Es posible que muchos operadores se hayan alejado de Moderna esta semana, lo que hizo que la acción cayera ayer un 7%. Las cuestionables palabras de Biden pueden resultar sorprendentes para algunos debido a que, aunque el número de víctimas mortales en EE.UU. se redujo significativamente, sigue siendo de cientos por día. Además, la semana pasada, la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró que el COVID sigue siendo una "emergencia mundial aguda". La declaración de Biden tampoco fue bien recibida por algunos expertos en salud que advirtieron que podría estar adelantándose a los acontecimientos. Además del factor mencionado, según algunos observadores del mercado, esta caída también puede haberse visto impulsada por la cautela de los inversores ante una posible subida de los tipos de interés por parte de la Fed que se espera que se anuncie el miércoles. (Source:The Guardian)
Por otra parte, las declaraciones de Biden también han provocado una reacción en otras empresas de biotecnología, incluida la propia competidora de Moderna, Pfizer (PFE). Pfizer, uno de los mayores ganadores de COVID, cayó un 1,2%. Esta caída menos drástica de las acciones de Pfizer en comparación con las de Moderna podría verse contrarrestada por el hecho de que la empresa registró un sólido crecimiento de los ingresos y las ganancias impulsado por la línea de productos COVID-19 y otros derivados. Mientras que los beneficios de Pfizer en el segundo trimestre de 2022 superaron las estimaciones de Wall Street, los de Moderna, no obstante, fueron un poco menos optimistas. Además, ayer, Pfizer también informó de los resultados positivos de su estudio de la vacuna de fase 3 en la UE, cuyo objetivo es prevenir las enfermedades pediátricas invasivas. Es posible que Pfizer pueda utilizar esto como un rayo de esperanza, que trascienda el Coronavirus y demuestre su potencial más adelante.
¿Qué es lo que sigue?
El futuro de Moderna y de la industria biotecnológica es aún incierto. Sin embargo, a pesar de las recientes caídas, algunos analistas de mercado afirman que, aunque el interés por las vacunas COVID puede ir a menos, es muy poco probable que los gobiernos y las organizaciones sanitarias dejen de utilizar los productos de Moderna. Además, mientras que Biden parece mantener una postura menos negativa hacia COVID, otros países como China, por ejemplo, no lo hacen. Por lo tanto, a escala mundial, no se puede llegar a una decisión concluyente sobre la trayectoria y el estatus de COVID, lo que significa que el futuro de las acciones de Moderna es incierto; puede ser prometedor o no.