Microsoft, Tesla e Intel, listas para publicar sus resultados
La primera temporada de resultados del año continuará con toda su fuerza esta semana, cuando algunos de los grandes nombres de la industria tecnológica estadounidense revelen cómo les ha ido en los tres últimos meses de 2022. Tras la volatilidad generalizada de las acciones, todas las miradas estarán puestas esta semana en Microsoft, Tesla e Intel, que publicarán sus informes trimestrales.
Amortiguación de Microsoft
Se espera que una de las empresas más venerables de la tecnología, Microsoft (MSFT), publique su informe del segundo trimestre de 2023 mañana, 24 de enero, después del cierre del mercado. Es posible que los inversores se sientan inquietos ante la publicación de mañana, dado el valor de más de 700.000 millones de dólares que la empresa perdió a lo largo de 2022. El precio de las acciones de Microsoft se desplomó un 28% durante el año.
Microsoft parece estar sufriendo una resaca post-pandémica a medida que las empresas y los consumidores se aprietan el cinturón; la demanda de la computación en nube Azure de la empresa podría revelar una tendencia a la baja a finales de 2022. En consecuencia, puede que no haya sorprendido que los ejecutivos de Microsoft anunciaran recientemente despidos que alcanzan las cinco cifras.
Sin embargo, algunos analistas parecen ser optimistas con respecto al próximo lanzamiento de mañana. Microsoft ha reorientado sus inversiones hacia el campo en desarrollo de la inteligencia artificial, lo que podría dar un impulso al alza a los resultados de la empresa. Las estimaciones para el segundo trimestre de 2023 apuntan a un beneficio por acción de unos 2,31 dólares, con unos ingresos totales de algo menos de 53.000 millones de dólares. (Fuente:Forbes)
Tesla pisa el freno
En los últimos meses, gran parte de la opinión del mercado sobre las perspectivas del gigante de los vehículos eléctricos Tesla (TSLA) ha girado en torno a la controvertida adquisición de Twitter por parte de Elon Musk. Algunos han llegado incluso a calificar de "pesadilla" para Tesla las repercusiones del acuerdo de adquisición de 44.000 millones de dólares de Musk.
Tesla publicará los resultados del cuarto trimestre de 2022 el miércoles 25 de enero, tras el toque de la campana de cierre. Es probable que las cifras del cuarto trimestre se vean influidas por la ralentización económica en los principales centros de fabricación de China debido a los cierres de COVID-19, así como por la caída de la demanda de vehículos nuevos.
Las acciones de Tesla cayeron la friolera de un 65% a lo largo de 2022, y las entregas de vehículos se situaron en 405.000 en el último trimestre del año pasado, lo que representa un crecimiento interanual del 40%, inferior al objetivo declarado por Elon Musk del 50%. Queda por ver si el miércoles se confirman las estimaciones de un beneficio por acción de 1,13 dólares sobre unos ingresos de 24.900 millones de dólares; si se puede restablecer la confianza en las acciones de Tesla en los parqués neoyorquinos es algo que aún está en el aire.
¿Intel en apuros?
Los nubarrones pueden cernirse sobre la próxima publicación de resultados de Intel (INTC) del cuarto trimestre de 2022, el jueves por la tarde, tras la pérdida del 48% del precio de sus acciones en 2022. La demanda de ordenadores personales experimentó una caída sin precedentes durante el año pasado, y los inversores podrían estar pendientes de cómo ha afectado esto drásticamente al negocio principal de Intel.
Esta empresa, como muchas de sus homólogas del sector, ha tenido que recurrir a despidos y otras medidas de recorte de costes, que se espera alcancen los 3.000 millones de dólares en 2023, para reducir los gastos generales ante un clima empresarial adverso. Un factor importante que afectará a Intel en el futuro será si su línea de negocio de centros de datos puede restablecer la confianza de los consumidores, pero aún no está claro cómo reaccionarán los mercados ante una cifra de beneficios por acción prevista de 20 céntimos sobre unos ingresos de algo menos de 14.500 millones de dólares.
Los tres últimos meses de 2022 fueron difíciles para diversos sectores de la economía estadounidense, y el tecnológico no fue una excepción. Se desconoce si esta tendencia se romperá a medida que avance la temporada de resultados.