El miércoles se publicarán los datos del IPC de abril
El miércoles se publicará el informe del Índice de Precios al Consumo (IPC) de la Oficina de Estadísticas Laborales de Estados Unidos. Según los principales expertos en tendencias macroeconómicas estadounidenses, podría producirse un descenso de la inflación récord del país.
Aumenta la preocupación por la inflación
La inflación ha sido una de las principales preocupaciones de los responsables políticos de Estados Unidos en los últimos meses, ya que la recuperación de los bloqueos mundiales puestos en marcha para combatir las infecciones de COVID-19 hizo que el aumento de los precios alcanzará su nivel más alto desde la primera administración de Reagan. Aunque los viajes internacionales se han recuperado, en gran medida, de los nadires alcanzados en 2020, los problemas con las cadenas de suministro mundiales han seguido elevando los costes de los bienes clave tanto para los productores como para los consumidores de Estados Unidos.
Un obstáculo adicional en el camino para reducir los niveles de inflación a la "tasa ideal" de alrededor del dos por ciento fue creado por los efectos del conflicto en Ucrania. Cuando la Federación Rusa, responsable de abastecerse de una parte importante del petróleo (CL) y del gas natural (NG) necesarios para el funcionamiento de la economía mundial, se vio sometida a un amplio tramo de sanciones occidentales, los precios de la energía subieron en todas las economías industrializadas. El precio del barril de petróleo subió bruscamente, alcanzando un máximo de casi 125 dólares el 8 de marzo.
Por ello, a los observadores del mercado no les habrá sorprendido que los datos del IPC del mes pasado revelaran que los precios para los consumidores estadounidenses habían aumentado en su tasa más alta desde 1981, un 8,5%. Los datos del índice de precios al consumo publicados el 12 de abril fueron los primeros en incluir los efectos del conflicto en Ucrania, por lo que la tasa "general", que incluye los precios de los alimentos y la energía, fue especialmente alta. Estas cifras de inflación excepcionalmente altas pueden haber estado detrás del giro de halcón del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC), que recientemente subió los tipos de interés por primera vez desde 2018, tras mantener políticas relativamente dóciles durante el transcurso de la pandemia de coronavirus.
Informe del miércoles sobre el IPC
Los principales economistas coinciden en que el informe sobre el IPC del miércoles mostrará probablemente una desaceleración de la inflación en abril. Se espera que el índice general se sitúe en el 8,1% interanual. Dado que el petróleo ha bajado un 16,5% desde su máximo de marzo a finales de abril, los consumidores pueden haber obtenido cierto alivio en el surtidor el mes pasado.
Sin embargo, si se excluyen los precios del petróleo, el gas y los productos alimenticios, el aumento de los precios entre abril de 2021 y el mes pasado es aún menor, y se prevé que sea del 6%. Está claro que el aumento de los precios se ha moderado un poco; hasta diciembre, la inflación subyacente interanual había llegado a ser del 6,5%.
A pesar del alivio que algunos pueden sentir si el informe del miércoles muestra una desaceleración en el aumento de los precios, los principales responsables de la Reserva Federal pueden pensar de manera diferente. Según muchos, el presidente de la Fed, Jerome Powell, ha estado señalando que el banco central de Estados Unidos está dispuesto a ir mucho más lejos con las herramientas monetarias que tiene en su pecho para controlar la inflación desbocada. Las próximas reuniones del FOMC, como la que se espera que se celebre entre el 14 y el 15 de junio, podrían muy bien concluir con subidas más rápidas de los tipos de interés, aunque tales medidas se produzcan a costa de un menor crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB).
Aunque los economistas parecen estar bastante seguros de sus predicciones en cuanto al contenido del informe de la Oficina de Estadísticas Laborales, aún no está claro cómo reaccionarán los mercados a la publicación del miércoles. Los inversores podrían trasladar su patrimonio a activos de refugio como el oro (XAU) y la plata (XAG). Además, los valores tecnológicos y de crecimiento, que ya están en una tendencia a la baja tras los decepcionantes informes de beneficios del primer trimestre, podrían seguir cayendo. Habrá que esperar a ver cómo afectan los datos del índice de precios al consumo de abril a los principales índices el miércoles.
